He empezado la mañana bien, como todos los días, y sobre todo los miércoles, ya que tengo 2 horas seguidas de matemáticas con el grupo de 2º (hacemos desdoble en esa sesión). Y como todos los miércoles ha ido bien.... salvo por el petardo de turno que nada más acabar la explicación pregunta (TODOS los días): "profe, ¿qu'hay qu'hacer?", o bien "¿en cuál página vamos?". ¡Caramba! Que he dicho (varias veces) abrimos el libro por la página..... para a continuación explicar qué vamos a hacer en la sesión, poner ejemplos para que no queden dudas, resolver las que puedan quedar, y justo cuando empieza el rato de trabajo individual, él pregunta....
En fin, seguimos. El resto de la mañana (vigilancia de patio incluída) ha ido bien, sin quejas. A la 1, reunión de evaluación: 4 clases, y yo conozco a 3 niños; ya te puedes imaginar lo que me divierto en esas reuniones.
Tarde: la primera hora pasable (inmersión lingüística) y luego ha llegado el "mejor" rato. Me tocaba con uno de los chicos que pueden parecer a priori más problemáticos, pero que conmigo no ha dado mayores problemas.... Hasta hoy, que he recibido codazos y golpes varios por intentar sacarlo de la clase para que viniese conmigo. Al final la situación se ha reconducido deprisa y muy bien. Tanto, que a falta de 2 minutos para acabar la clase ha pedido más trabajo. Aissss.... niños.
Masajista, y a echar una charradeta con mis papis (la peduga estaba en su casa, como cada día que tengo masaje). En éstas que me dice mi padre que ha sacado el coche del garaje (aparco en el de una vecina que no está, con su permiso) y que llevo una rueda muy baja y la llanta correspondiente doblada; que ponga aire a la rueda y arregle la llanta YA. Cuando he salido de su casa, he entrado en la primera gasolinera que hay, bien cerquita y efectivamente, la rueda estaba a menos de la presión de lo que debiera. Pero , ¡ay! al intentar hincharla, al pasar de los 1'8 kilos (o bares, o lo que sea que es, debe estar en 2'1) empezaba a perder aire por donde la llanta está doblada.
Así que a ver si mañana por la mañana mi señor novio puede escaparse 10 minutos de los que le corresponden (en teoría) de descanso para almorzar y lo lleva al taller que hay junto al curro, o me tocará a mí llevarlo por la tarde.... a no sé qué taller.
A eso le sumamos que llevo la espalda hecha fosfatina, que me duele la cabeza, y que debo de tener la tensión por las nubes. Me noto como hace unos años que, por un estrés tremendo en el cole, se me descompensó todo y estuve varios meses con la tensión y las transaminasas altísimas.
¿Comepnsación del día? Que he hablado con mi sobrino por el Skype, he charrado un rato con mi madre, y que tengo a la peduga en mis pies, bien juntita. Pero lo mejor está por llegar, y será cuando llegue Chabi a casa de sus clases. Que el no comer en casa 3 días consecutivos se me hace muy duro....
Y ya está, éste ha sido mi día. ¿Ha sido para tanto? No, pero cuando el malestar por tonterías se va acumulando, al final para lo de hoy, que tengo unas ganas de llorar que para qué. Pero como sé que terminará por pasar, tampoco le voy a dar más vueltas de las que ya le he dado escribiendo esta comedura de tarro.
Abrazos pretos y besicos a puñaos.
P.D.: De regalo hoy sólo voy a dejarte una frase. Aquí queda.
La formulación de un problema, es más importante que su solución.
(Albert Einstein)